Historia
III
Prof:
Javier Gerbasi
Horario
Lunes de 17 a 21
Presentación
de la materia
Buenas
tardes a todos y todas, mi nombre es Javier Gerbasi (la mayoría creo que ya me
conoce) y conmigo van a tener en este cuatrimestre, que es el último para
muchos, dos materias: Historia-geografía e IECS, Introducción al estudio de la
Sociedad y el Estado.
En
nuestro primer encuentro intentaremos delinear la metodología de cursada de
ambas materias y estableceremos distinciones, diferencias, horarios, etc. En
virtud del particular contexto en que venimos trabajando vamos a tener que
adaptarnos e intentar superar dificultades (siempre las hay, pero la pandemia
vino a agregar algunas nuevas y a profundizar otras que ya existían) para que
uds puedan finalizar esta etapa del secundario de la mejor manera, lo que
implica no solo “terminar” sino también que puedan aprender cosas que antes no
sabían o que tienen alguna idea ya formada que quizás deba ser repensada (o
confirmarlas).
El
programa de Historia-geografía corresponde al estudio de la historia argentina
en el contexto mundial. Eso implica que intentaremos ir conociendo nuestra
historia teniendo en cuenta también el desarrollo de la historia mundial, ya
que están íntimamente relacionadas. Es un programa largo y supone un grado de compromiso
bastante alto, ya que abarca desde el proceso que desembocará en nuestra
independencia hasta prácticamente la actualidad.
Con
respecto a la otra materia, IECS, la temática no está centrada en un estudio de
la Historia de la Cultura o de la Sociedad sino en investigar y explicar que
son, como funcionan, cuales son sus condicionantes, etc. Este recorrido nos
permitirá comprender muchas de las cuestiones que nos rodean habitualmente, como
la naturalización de las diferencias sociales, el machismo, el racismo y otra
gran gama de discriminaciones y violencias.
Bueno,
como presentación es suficiente, ahora los invito a que participen, lean,
pregunten, trabajen y aprovechen lo que pueda haber de bueno en esta situación
que no es buena.
Abrazo
Javier
Gerbasi
Fundamentación
En el
contexto de los nuevos desarrollos de la historia y geografía con enfoque social, el presente diseño, en el que se
tienen en cuenta las características cuatrimestrales del dictado de la materia
(por lo que el desarrollo del mismo se basará en la problematización de problemas
y cuestiones fundamentales de la historia y la geografía nacional), formula un nuevo planteo de los
grandes relatos; entre ellos los que refieren el retorno a la escena histórica
de los sujetos como actores con capacidad para incidir en la vida social,
abandonando las explicaciones simplificantes de corrientes historiográficas que
ponen el acento en la acción de los “grandes hombres” o en la acción misteriosa
de estructuras subyacentes e incontrolables que van determinando absolutamente
la vida de los hombres.
Al ser
una materia que articula diferentes momentos históricos, es importante destacar
que las relaciones de dominación y poder, la circulación económica, el espacio
geográfico y la circulación de cultura implican procesos complejos difícilmente
reductibles en un esquema analítico. Por lo tanto cada proceso histórico
requieren una construcción que de cuenta de las formas de interrelación entre
procesos mundiales, latinoamericanos y argentinos.
Objetivos de la Enseñanza
Que el
alumno alcance los aprendizajes esperados:
· Retomar conocimientos escolares y
propios de los estudiantes y analizar sus alcances y limitaciones.
· Promover la participación crítica
sobre la lectura de los textos.
· Discutir y organizar los conceptos
básicos propios de la disciplina o de las Ciencias Sociales.
· Propiciar puestas en común de lo
trabajado.
· Provocar intercambios grupales.
· Promover la utilización de diversas
fuentes históricas y bibliográficas.
· Fomentar el trabajo en clase grupal e
individual tendiente a la discusión y análisis de distintos problemas
históricos incorporando diversidad de fuentes y puntos de vista.
Objetivos del aprendizaje
Al
cabo del itinerario de estudio planteado, se espera que los estudiantes, a
partir de diversas situaciones de trabajo propuestas puedan:
· Interpretar la diversidad de los
procesos sociales de la Argentina teniendo en cuenta los contextos mundiales y latinoamericanos como resultado
del desarrollo de la trama multicultural y las transformaciones del sistema
mundo a lo largo del siglo XX.
· Reconocer la conformación social y
económica de nuestro país en relación con las demandas de los países
industrializados y la crisis de ese modelo de intercambio y su
reestructuración.
. Ya que
la enseñanza de la Historia, como ciencia que estudia el desarrollo de
las sociedades a través del tiempo desde múltiples miradas, está inseparablemente
unida al reconocimiento y a la comprensión de los espacios geográficos en los
que se desarrollan, se espera la comprensión tanto de los espacios geográficos
han condicionado e influido en el desarrollo y conflictos de nuestra sociedad y
las condiciones políticas y naturales que los determinaron, teniendo en cuenta la carga política e ideológica que subyace a
cada representación que se hace del espacio geográfico argentino.
· Analizar la importancia de las relaciones
de producción y poder que paulatinamente estructuraron una economía y un
espacio mundial, favoreciendo el establecimiento de relaciones asimétricas en
el sistema de economía-mundo.
· Reconocer y elaborar hipótesis de
interpretación sobre los fenómenos sociales, económicos, políticos y procesos
históricos, en base a la diversidad, multicausalidad y las diferentes miradas
historiográficas en los procesos sociales argentinos.
· Comprender las características de la
construcción del conocimiento histórico y sus distintas líneas de estudio (historia
política, historia social, historia económica, historia cultural, historia
reciente, otras).
· Incorporar como estrategia de enseñanza
diversidad de textos históricos en un grado creciente de complejidad que sean
representativos de las distintas corrientes historiográficas.
· Ejercitar prácticas de lectura en las
que se promueva el análisis de argumentos, hipótesis, y conclusiones.
· Ejercitar prácticas de escritura que
propongan la elaboración de distintos géneros tales como informes, comentarios
bibliográficos, notas, entre otros.
CONTENIDOS
Unidad
nro. 1: Los procesos revolucionarios
1.Transformación
y renovación en América Latina -Los acontecimientos europeos
2. Las
luchas por la organización independiente -Movimientos de independencia.
3. La
Confederación Argentina. Los enfrentamientos con respecto a la organización
política y económica.
Unidad
nro. 2: La Formación del Estado Nacional en la Argentina
1. La
Organización Institucional después de Caseros -El proceso de centralización y
subordinación política
2. La
Argentina Moderna (1880-1916) - Los
años de gobierno oligárquico conservador-La Inserción de la Argentina en el
mercado mundial
3. Los
cambios sociales. La gran inmigración
4. La
Crisis Política. El Nacimiento de la oposición-Los Nuevos Partidos Políticos
5. La
ley Sáenz Peña
Unidad
nro 3. Transformaciones en el mapa político de la Argentina y sus antecedentes
históricos
1.Del
Virreynato al Estado Nación
2.Espacio
geográfico. Relieve-clima-demografía
3.Geografía
económica
Unidad
nro. 4: América Latina: La creación de un orden nacional y su definitiva
inserción en el espacio mundial
1. La
Consolidación Del Estado
2. Los
casos nacionales
3.Las
Transformaciones Económicas-La Inserción de América Latina en la división
internacional del trabajo -El reclutamiento de mano de obra
4. Las
transformaciones políticas
5. La
intervención norteamericana en la política continental
Unidad
nro. 5: Crisis de la democracia ampliada y restauración oligárquica en la
Argentina
1.El
ascenso al poder del radicalismo
2. Los
gobiernos radicales: Su caracterización-La
primer presidencia de Hipólito Yrigoyen (1916-1922)-La presidencia de
Marcelo T. De Alvear (1922-1928)-Segunda presidencia de Yrigoyen (1928-1930)
3.
La “Cuestión Social”
4. La
crisis de la institucionalidad: El primer
golpe de estado
Unidad
nro. 6: La restauración conservadora
1. Las
fuerzas armadas y la política-El nuevo rol del estado
2. El
fraude “patriótico” y la represión- Resistencia y organización del movimiento
obrero
3. El
modelo sustitutivo de importaciones.
Unidad
nro. 7: El triunfo de la democracia de
masas: el peronismo en el poder
1.El
avance de la democracia de masas-Discusiones acerca del carácter del populismo
2. El
ascenso político de Juan D. Perón
3. El
proyecto económico peronista
4. Las
grandes transformaciones sociales de la Argentina peronista -Sindicalismo y
peronismo-Las resistencias políticas al
peronismo
5. La
proscripción del peronismo: una sociedad dividida y enfrentada
Unidad
nro. 8: La Argentina en la sombras: una larga crisis institucional y política
1. La
pendularidad política: de la democracia restringida a los golpes militares
2.La
proscripción del peronismo y el ascenso
del desarrollismo-El proyecto económico del desarrollismo
3.La
situación política y económica en la argentina de los años ’60
4. El
fin de la proscripción: el peronismo al poder (1973-1976)
Unidad
nro 9: El terrorismo de Estado
1.
“El Proceso de Reorganización Nacional”-La
Dictadura cívico militar-Terrorismo de Estado- planificación, metodología y objetivos-
2.
relación
con el plan económico-La patria financiera-
3.
Guerra de Malvinas-El colapso de la dictadura y
la recuperación de la democracia.
Unidad
nro. 10: Democracia, crisis del Estado y neoliberalismo
1.
Regreso de la democracia y recuperación de la
cultura democrática
2.
Política de DDHH- Conadep, juicio a las juntas,
leyes de Punto Final y Obediencia debida
3.
Búsqueda infructuosa de un modelo económico- la
hiperinflación
4.
Relecturas acerca del pasado dictatorial
5.
La Argentina Neoliberal-características delos
gobiernos menemistas. Privatizaciones y Plan de convertibilidad. Política
frente a las FFAA- ley de Amnnistía. Cultura del consumo y del individualismo.
Reforma de la Constitución. Profundización de la pobreza estructural,
desindustrialización y desempleo. Aumento de la brecha entre pobres y ricos
6.
Gobierno de la Alianza- continuidades y
diferencias. El problema de la deuda y el ajuste eterno. Crisis del 2001
7.
Kirchner
y la recuperación económica- Políticas de Memoria, verdad y justicia
Estrategias didácticas
·
Lectura y análisis de fuentes primarias y
secundarias
·
Proyección de material audiovisual
·
Realización de trabajos de investigación
·
Actividades de integración
·
Análisis de material cartográfico
·
Confección de líneas de tiempo y redes
conceptuales
·
Guías de lectura
·
Debates
Criterios de evaluación
·
Uso correcto de la terminología específica de
la disciplina
·
Capacidad para explicar los diferentes procesos
históricos y la geografía de nuestro país
·
Capacidad para relacionar e integrar procesos
que se dan sincrónicamente en espacios diferentes
·
Competencia en la argumentación oral y escrita
·
Responsabilidad y trabajo en clase
·
Realización y entrega en tiempo y forma de los
trabajos y actividades propuestas
Instrumentos de evaluación
·
Evaluación periódica y sumatoria del trabajo en
clase
·
Trabajos prácticos
·
Exámenes orales
·
Evaluación integradora
ACTIVIDAD 1 - La
Revolución en el Río de la Plata
a) Elaborar
un texto que describa las sucesivas formas de gobierno entre 1810 y 1812.
Responder cual era la tendencia si se tiene en cuenta el número de integrantes
del Poder Ejecutivo.
b) Explique
el conflicto entre Buenos Aires y el artiguismo.
c) ¿Cuáles
fueron las razones para declarar la Independencia en 1816?
d) ¿Cuál
fue el papel de San Martín en la declaración de la Independencia?
e) Explique
la participación de las clases populares en el proceso revolucionario.
Federalismo
y centralismo: aspectos políticos e intereses económicos
En
los primeros años de la década de 1820 se consolidaron en el interior nuevos
liderazgos surgidos de las zonas rurales, que reemplazaban a los grupos
urbanos. El Litoral se encontraba debilitado por las guerras de la
independencia y la Banda Oriental se había convertido en una provincia del
imperio del Brasil en 1821. Los
caudillos, estos nuevos dirigentes políticos postrevolucionarios estaban lejos
de ser la expresión de la anarquía y el vacío institucional: desde 1820 fueron
actores de una compleja vida política-institucional provincial. Puede afirmarse
que los caudillos reflejaron los intereses o necesidades locales o provinciales
en el seno de una confederación de provincias autónomas que, a partir de 1831,
intentaron llegar a acuerdos que permitieran mantener unidos a los territorios
del antiguo Virreinato rioplatense.
BUENOS AIRES: LAS REFORMAS Y EL INTENTO
CENTRALIZADOR DE BERNARDINO RIVADAVIA
Buenos
Aires experimentó un período de tranquilidad política a partir de 1820. El fin
del esfuerzo que significó la guerra y el beneficio que le otorgaban los
ingresos de la Aduana abrieron paso a una etapa conocida como la "feliz
experiencia". Durante el gobierno de Martín Rodríguez se produjo un
importante programa de reformas.
Las
políticas emprendidas, procuraron centralizar el poder, modernizando el Estado
y sus instituciones. Ese conjunto de medidas se conoce con el nombre de
"reformas rivadavianas" porque Bernardino Rivadavia, en ese momento
ministro de Rodríguez fue quien las impulsó. Dichas reformas estaban inspiradas
en los principios políticos del liberalismo y en sus aspectos económicos
expresaban a las bases de apoyo con las que contaba el gobierno: los grandes
ganaderos y comerciantes porteños.
El
proceso político y militar que se conoció como "la campaña contra el
indio" fue una política de expansión territorial e incorporación de
tierras que el Estado otorgaba luego a particulares a través del régimen de
enfiteusis. La enfiteusis era un contrato mediante el cual un propietario arrendaba (alquilaba) una
extensión de tierra conservando su propiedad. Esta ley, dispuso la entrega en
arriendo de tierra pública. La misma
siguió siendo propiedad del Estado, que la usó como garantía para el empréstito
contratado con la casa Baring. El arriendo y compra-venta de tierras, junto a
los intentos por disciplinar la mano de obra, iban sentando las bases de una
estructura económica capitalista.
La
situación de tranquilidad que vivió Buenos Aires le permitió liderar un nuevo
intento de organización nacional. En 1823 convocó a todas las provincias a un
nuevo Congreso General que comenzó a sesionar a fines del año siguiente. Pero
diversos problemas dificultaron su accionar, entre los que se destaca la guerra
con el Brasil por la Banda Oriental. La tensión provocada por la guerra hizo
que en 1826 el Congreso dictara una Constitución de corte unitario y nombrara
presidente a Bernardino Rivadavia en un nuevo intento de unificación nacional.
La
Guerra con el Brasil
La
Banda Oriental -después del rechazo de los diputados a la Asamblea del año
XIII-, quedó separada de las Provincias Unidas y conducida por José Gervasio de
Artigas. La política centralista del Directorio de Buenos Aires chocaba con
Artigas, quien con su proyecto federal, atrajo también el apoyo de otras
provincias, como Entre Ríos, Santa Fe y Córdoba. En 1817, los portugueses
invadieron la Banda Oriental (con la complicidad del Directorio de Buenos
Aires) y ocuparon Montevideo, desplazando a Artigas quien terminó siendo
vencido en 1820 en la batalla de Tacuarembó. En 1822, Brasil se independizó del
Reino de Portugal; el territorio de la Banda Oriental fue incorporado al
Imperio del Brasil. El conflicto por la ocupación se mantuvo en suspenso hasta
1825. En ese año, una expedición de "Los treinta y tres orientales"
al mando de Lavalleja, desembarcó en tierras orientales, organizó la
resistencia y declaró la independencia de la Banda Oriental del imperio
brasileño y su anexión a las Provincias Unidas del Río de la Plata. Al
conocerse esta medida en Buenos Aires, el Congreso reunido declaró la guerra al
Brasil en octubre de 1825. Sólo los territorios costeros de Colonia, Montevideo
y Maldonado quedaron en manos brasileñas cuando se inició la guerra, pero
después de algunas victorias militares para las Provincias Unidas, el nombrado
presidente Rivadavia envió a Manuel García a
firmar la paz, que reconocía los derechos del Brasil sobre la Banda
Oriental. El acuerdo fue desconocido por el Congreso de Buenos Aires, lo que
aceleró la renuncia de Rivadavia. En 1828, durante el gobierno de Manuel
Dorrego, se reabrieron las negociaciones y con la mediación inglesa se firmó
una paz definitiva en la que se acordó la creación de la República Oriental del
Uruguay como un estado independiente.
Grupos
de oposición y caída de Rivadavia
Si
bien Rivadavia contaba con el apoyo de los comerciantes que se beneficiaban con
el librecambismo y de los hacendados que respaldaban su política de tierras que
les permitía acumular grandes extensiones, las oposiciones que tuvo fueron mayores.
La ley capitalización, que transformaba a Buenos Aires en capital de la Nación
generó la oposición de los grupos porteños dominantes que no deseaban que la
ciudad, su puerto y los ingresos de la aduana pertenecieran a toda la Nación en
lugar de ser exclusivos de la provincia. En diciembre de 1826, se sancionó una
Constitución que era de corte netamente unitario. Enunciaba en su primer
párrafo que se constituía la unidad del régimen y entre las atribuciones del
presidente estaban la elección de los gobernadores de las provincias y
centralizaba las decisiones de todas las políticas provinciales. Por esta
razón, todas las provincias la rechazaron y no se puso en práctica. A ello se
sumó el fuerte rechazo de la población y del ejército ante las gestiones diplomáticas
que ponían fin a la guerra contra el Imperio del Brasil. Como señalábamos, el
tratado de paz reconocía la soberanía brasileña sobre la Banda Oriental, en
tanto que se consideraba que la guerra había sido una victoria para las
Provincias Unidas. Este conjunto de causas obligaron a Rivadavia a renunciar en
junio de 1827.
ENFRENTAMIENTOS ENTRE
UNITARIOS Y FEDERALES: ASPECTOS POLÍTICOS E INTERESES
ECONÓMICOS
Hemos
planteado, en la introducción de esta Unidad que el período 1820-1852 se
caracterizó por el conflicto derivado del enfrentamiento entre distintos
proyectos políticos sobre la organización del país.
Las
tres décadas están atravesadas por esa oposición que se manifestó tanto en la
discrepancia en el debate de ideas como en la violencia política y los
enfrentamientos militares que derivaron en guerras civiles.
Sin
duda, la disputa principal era entre el unitarismo y el federalismo. Este
conflicto no se puede analizar en términos de "Buenos Aires y el
Interior". Si bien la mayoría de los centralistas se encontraba en la
antigua capital del Virreinato, los había por todos lados. Muchos comerciantes
de las ciudades del interior consideraban que sus intereses estarían mejor
asegurados por un gobierno central, y, como veremos a continuación, Buenos
Aires era un espacio en el que las ideas federales también tenían muchos
adeptos.
A
su vez, dentro de los grupos federales existían diferencias importantes.
Podemos dividirlos en tres grupos. Los federales del Interior, los federales
del Litoral y los federales de Buenos Aires, estos últimos ordenados a su vez
en "doctrinarios y autonomistas". Estos grupos sociales y regionales,
con mayor o menor grado de antagonismo, tenían diversos intereses económicos
que encontraban en el plano de las ideas un lugar donde manifestar y dirimir
sus conflictos.
En
primer lugar diferenciaremos las dos formas básicas de organización política:
el centralismo y el federalismo.
El
centralismo o gobierno unitario, se caracteriza principalmente porque todos los
gobiernos locales se encuentran subordinados al poder central. Unifica o
centraliza el gobierno desde un centro y además también unifica las decisiones
para todo el territorio sin tener en cuenta las diversidades regionales. Los
federales se basan en la asociación de estados locales respetando la autonomía
de cada uno y delegando algunas funciones en el Estado central.
La
Argentina, tal como la conocemos hoy, no existía. El territorio del antiguo
Virreinato del Río de la Plata, después de la revolución de Mayo de 1810
comenzó a dividirse en territorios más pequeños, las provincias. Estas tenían
una marcada tendencia al federalismo y los intentos de formar un Estado
centralista fracasaron. Sin embargo, a pesar de que las provincias luchaban por
su autonomía, también dejaron claro que tenían la intención de formar un Estado
central que las contenga y su independencia. Salvo en el caso del Paraguay,
Bolivia y Uruguay, que terminaron por ser países independientes, el resto de
las provincias se mantuvo ligado entre sí a través de acuerdos o pactos
interprovinciales.
Es
decir, las provincias pretendían un Estado Central que respetara sus autonomías
y que garantizara la distribución de los ingresos del puerto de Buenos Aires.
Pero en Buenos Aires, algunos federales no querían ceder la ciudad y los
ingresos del puerto, por lo que se diferenciaron dos grupos dentro del
federalismo porteño: los federales doctrinarios y los federales autonomistas
bonaerenses, defensores de la exclusividad del puerto y de los privilegios de
la provincia. Este último federalismo se identificó con la figura de Juan
Manuel de Rosas, quien representaba los intereses de los hacendados de Buenos
Aires. El federalismo que encarnaron las provincias del litoral reclamaba,
además de las autonomías provinciales, la libre navegación de los ríos
interiores para comerciar en iguales condiciones que los hacendados
bonaerenses. Por su parte, las provincias del Interior, reclamaban aranceles
aduaneros que protegieran la producción local de la competencia con los
productos que llegaban del mercado externo.
Diferencias
regionales en las Provincias Unidas del Río de la Plata
Las
diferentes regiones -Buenos Aires, Litoral y el Interior- tenían intereses
específicos; a cada una de ellas la conformación del Estado nacional la afectó
distinta forma. Estas diferencias de intereses, eran formas de crecimiento
muchas veces contradictoria que se reflejan en las diferencias políticas y se
expresan en las luchas que impidieron la conformación de un Estado central durante
casi todo el siglo XIX. Uno de los puntos de conflicto fue la posición que
tenían con respecto al librecambio. El librecambio, es decir la libertad
comercial con el exterior, fue la política comercial del puerto de Buenos Aires
desde la revolución de Mayo. El grueso de los ingresos fiscales, provenía de la
aduana de Buenos Aires y fueron imprescindibles para llevar adelante las
guerras de independencia.
Buenos
Aires, sostenía que esos ingresos eran exclusivos, ya que eran del puerto
propio y por lo tanto se negaba a compartirlos con las demás provincias. Éstas,
contrariamente, sostenían, que esos recursos debían redistribuirse. Otro
aspecto era la política aduanera en sí, es decir el debate entre el
librecambismo o el proteccionismo. Como dijimos, librecambio era la política
que sostenía la libertad comercial y bajos aranceles aduaneros que favorecieran
el intercambio con el exterior. Buenos Aires era impulsora de esa política ya
que su producción ganadera era colocada en el mercado externo y consumía artículos
de importación, principalmente de Gran Bretaña.
El
Litoral tenía un tipo de producción similar a la de Buenos aires y la política
de libre cambio también beneficiaba a los productores de esas provincias pero
comercializaba en desventaja con respecto a los productores bonaerenses ya que
debían trasladar su producción hasta el
puerto
de Buenos Aires que a su vez les cobraba un arancel por su uso. Tanto Entre
Ríos como Santa Fe, reclamaban la libre navegación de los ríos Paraná y Uruguay
para poder habilitar sus puertos y comerciar directamente con el exterior en
igualdad de condiciones.
La
situación de las provincias del Interior (la región de Cuyo, el Centro y
Noroeste) era distinta; estas provincias tenían una producción artesanal que
competía con los productos británicos que llegaban al puerto de Buenos Aires.
Tradicionalmente, estas provincias colocaban su producción en las regiones del
Interior ligadas a la economía del Potosí, cuando la guerra de independencia
cortó ese circuito comercial sus productos se quedaron sin mercados, y
necesitaban desde Buenos Aires una política aduanera proteccionista, es decir,
que protegiera su economía de la competencia británica y privilegiara el
consumo de la producción local, pero eso era incompatible con los intereses de
Buenos Aires que crecía en base al intercambio con Gran Bretaña.
En
la época de Rosas -concretamente en 1835- se promulgó la ley de Aduanas, que si
bien tuvo en cuenta algunos de los reclamos de las provincias, protegía sobre
todo la producción de la provincia de Buenos Aires, y no cambiaba el sistema
comercial en donde Buenos Aires era el único puerto habilitado para el comercio
con el exterior.
Política
y sociedad en el orden rosista.
EL
TRIUNFO FEDERAL Y EL ASCENSO DE ROSAS
Entre
1828 y 1831, el enfrentamiento entre unitarios y federales se extendió por todo
el país.
Con
la renuncia de Rivadavia se derrumbó el proyecto unitario y el gobierno
central. Se inició entonces una etapa caracterizada por las guerras civiles que
culminaron con el triunfo del federalismo bajo el liderazgo de Juan Manuel de
Rosas.
Los
violentos hechos de esos años marcaron el punto máximo de la escalada entre los
dos grupos. Hacia 1831, el país se encontraba dividido en dos agrupaciones: la
Liga del Interior y el Pacto Federal. La guerra entre ambos parecía inminente,
pero la caída del General Paz -líder de la Liga del Interior- en manos enemigas
desmembró ese acuerdo y los federales se impusieron en todo el país.
En
esos años, los caudillos más destacados eran Facundo Quiroga (La Rioja),
Estanislao López (Santa Fe) y Juan Manuel de Rosas (Buenos Aires). Cada uno de
ellos representaba los intereses de su región y expresaban las diferencias
internas del federalismo. De a poco logró imponerse Rosas. Se formó una
Confederación y volvió a retrasarse el dictado de una Constitución y la
conformación de un Estado nacional.
EL
"ORDEN ROSISTA": LA HEGEMONÍA DE BUENOS AIRES Y LA VIOLENCIA POLÍTICA
Rosas
fue designado gobernador de Buenos Aires en 1829. Durante sus dos gobiernos
-que se extendieron hasta 1832 el primero y desde 1835 hasta 1852 el segundo-
se consolidó la hegemonía de la provincia sobre el resto del país. La
Confederación Argentina funcionó a través de pactos y acuerdos entre
provincias. Buenos Aires obtuvo el manejo de las relaciones exteriores, esto
significa que representaba a la Confederación como un Estado independiente en
el plano internacional.
Rosas
demoraba el dictado de una Constitución que implicara la organización nacional
y la consecuente pérdida de las rentas aduaneras para Buenos Aires. Bajo sus
gobiernos se fue fortaleciendo económicamente el sector terrateniente
bonaerense que crecía con la acumulación de tierras, a la vez que la economía
se vinculaba estrecha y exitosamente con las demandas del mercado
internacional. La acción legislativa y el avance de las fronteras -que Rosas
llevó adelante sobre el territorio aborigen entre los años 1833 y 1834- fueron
parte de una batería de acciones y medidas destinadas a fortalecer a este grupo
que, junto a los sectores populares urbanos y rurales, constituían las bases
sociales de su poder.
El
estilo de conducción política desplegado por Rosas ha generado polémicas que
llegan hasta nuestros días. Fueron años en los que se exasperaron los conflictos
y las lealtades políticas. Para algunos, Rosas no hizo más que demorar el
desarrollo del país; para otros, fue capaz de avanzar en la unión nacional y de
establecer las bases de un Estado moderno en la provincia, luego del fracaso
centralizador de Rivadavia.
A
lo largo de su gestión, la lucha entre unitarios y federales se fue desplazando
hacia otra dicotomía: rosistas y antirrosistas. La política tomó nuevas
manifestaciones que iban desde la violencia y la persecución hasta los festejos
populares y los actos masivos.
El
primer gobierno de Rosas. Las alianzas entre unitarios y federales.
El
1 de Diciembre de 1929, la legislatura porteña eligió gobernador de Buenos
Aires a Juan Manuel de Rosas y le otorgó facultades extraordinarias. Estas
facultades le daban algunas atribuciones, como por ejemplo, suspender algunos
derechos de seguridad individual. Mientras tanto, desde Córdoba, el general
Paz, controlaba el Interior, logrando la adhesión de diversas provincias al
proyecto unitario. Córdoba, Santiago del Estero, Tucumán y Salta formaron la
Liga Unitaria. Esa unión era una alianza ofensiva-defensiva en la cual los
Estados provinciales que la integraban, se comprometían a acordar políticas
comunes y delegar en el Gral. Paz la convocatoria a un congreso para dictar una
constitución que las abarque y a pactar con los Estados Extranjeros. Desde
Buenos Aires, Rosas impulsó la firma de un pacto entre las provincias de Buenos
Aires, Santa Fe, Entre Ríos y posteriormente Corrientes, que se conoce como el
Pacto Federal y que fue la base del acuerdo interprovincial hasta la
Constitución definitiva de 1853. El Pacto Federal (04/01/1831) era un acuerdo
ofensivo-defensivo por el cual los Estados provinciales prestan ayuda militar a
quien lo necesitara. Adoptaban la forma federal y republicana y reconocían sus
autonomías y derechos. También establecieron entre ellas la libertad de
comercio.
La
guerra entre unitarios y federales llegó a su fin cuando el Gral. Paz cayó
prisionero. Sin su conducción, la provincia de Córdoba se incorporó al bando
federal firmando el Pacto. Posteriormente, Facundo Quiroga desde La Rioja,
logró dominar las restantes provincias, las que también aceptaron el Pacto
Federal.
La
expansión de la frontera en Buenos Aires
La
frontera, desde la época de
la colonia española,
era la línea
de división entre la
"civilización" y la "barbarie". Separados por una línea de
fortines, del lado de la "civilización", estaba la sociedad dominada
por los españoles y criollos; y del lado de la "barbarie" los pueblos
originarios: Pampas y Ranqueles. Estas comunidades eran seminómades, y vivían
de la caza del ñandú y la recolección. La llegada de los españoles y la
introducción del ganado bovino generaron un desequilibrio en el ecosistema
desplazando a la fauna autóctona. El
ganado cimarrón, los animales sin dueño que deambulan por la
pampa, fue desplazando a las
especies existentes. Entonces, los
habitantes de la zona pampeana se vieron obligados a cambiar sus hábitos
alimenticios y a cazar ganado para sobrevivir. La "civilización"
también cazaba cimarrón para la producción de cuero en las vaquerías que era la
principal fuente de ingresos en Buenos Aires colonial.
Durante
el siglo XVIII, el aumento de la demanda de cueros para las exportaciones y la
matanza indiscriminada del ganado cimarrón generó escasez de recursos. Los
hacendados buscaron una solución organizando sus propiedades en estancias en
las que el ganado era criado y preparado para la producción de cueros. Con el
ganado cautivo, los pueblos originarios se vieron obligados a organizarse en
malones para atacar las estancias y conseguir recursos. Así, la línea de
fortines se transformó en una zona de enfrentamientos entre estos
dos
mundos tan distantes. Los estancieros vieron crecer sus ganancias y frente al
aumento de la demanda de producción buscaron extender sus propiedades.
Las
políticas de expansión de la frontera de Buenos Aires fueron constantes. Una de
las primeras campañas organizadas después de la independencia fue la de Bernardino
Rivadavia, quien durante el gobierno de Martín Rodríguez avanzó contra los
indios ranqueles y transformó la tierra de la provincia en tierra pública,
repartida con la ley de enfiteusis que contribuyó con el aumento de la
extensión de las propiedades y la formación de latifundios. Al finalizar su
primer gobierno, en 1832, Rosas se embarcó en una campaña de avance de la
frontera contra el indio, que aseguró el fin de los ataques a las propiedades
ya existentes y la incorporación de nuevas tierras, cuyo reparto resultó muy
beneficioso para los hacendados bonaerenses que siguieron incrementando base de
poder. Este sector social, fue creciendo y transformándose en el sector
hegemónico: desarrollaban una actividad muy rentable y obtuvieron la tierra a
muy bajo costo, mientras que la demanda exterior de sus productos agrícolas
crecía.
El
segundo gobierno de Rosas
Con
el asesinato de Facundo Quiroga, en 1835, la situación política se tornó más
compleja y convulsionada. En ese contexto, Rosas asumió la gobernación de
Buenos Aires por segunda vez.. En esa oportunidad, la legislatura le otorgó la
suma del poder público, que significaba la concentración de las atribuciones de
los tres poderes: ejecutivo, legislativo y judicial. El poder concentrado,
igual que el sistema absolutista, era admirado por Rosas, quien consideraba que
el gobernante debía ejercer su poder para organizar la sociedad sin ser
cuestionado.
Rosas contó
con el apoyo
de los sectores
altos de Buenos
Aires como hacendados y comerciantes
y también con el apoyo de los sectores populares tanto rurales como urbanos.
Durante su gobierno los hacendados incrementaron su poder, transformándose en
el sector dominante dentro de Buenos Aires. También, Buenos Aires conservó sus
privilegios exclusivos como el control del puerto y la aduana.
Los
opositores políticos al rosismo fueron perseguidos. Para esto contó con un
grupo de choque, compuesto fundamentalmente por empleados de la policía: la
Mazorca. Ésta era el brazo armado de la Sociedad Popular Restauradora (un club
de rosistas intransigentes que funcionaba bajo el auspicio de Encarnación
Ezcurra, esposa de Rosas).
CONFLICTOS
INTERNACIONALES Y MOVIMIENTOS DE OPOSICIÓN AL ROSISMO
Si
bien desde 1835 el orden rosista extendió su influencia en el país, los
conflictos y resistencias no dejaron de manifestarse hasta su caída. Los grupos
políticos y miembros del ejército unitario, los jóvenes intelectuales de la
Generación de 1837 e incluso algunos federales expresaron su disidencia. No
estuvieron ausentes los levantamientos en el interior y en el propio territorio
bonaerense, así como el accionar de los exiliados desde fuera de las fronteras.
Además,
se produjeron una serie de conflictos de nivel internacional que tuvieron
impacto en la política interna. Las luchas entre blancos y colorados en el
Uruguay repercutían en el contexto nacional gracias a las alianzas políticas
que se establecían entre los grupos de ambas márgenes del Río de la Plata.
Tampoco faltaron problemas limítrofes con la Confederación peruano-boliviana.
Asimismo, la competencia comercial entre Francia e Inglaterra, tuvo importantes
efectos en el Río de la Plata. Los bloqueos que estas potencias impusieron al
puerto de Buenos Aires o la usurpación de las Islas Malvinas por parte de Gran
Bretaña fueron acontecimientos vinculados a la expansión de ambas potencias.
El
bloqueo Francés
Francia
necesitaba aumentar su influencia comercial en América. En 1838, una flota
francesa bloqueó el puerto de Buenos Aires, reclamando que los residentes
franceses tuvieran el mismo trato que los ingleses y que, por lo tanto, fuesen
eximidos de prestar el servicio militar. Rosas solicitó que para hacer dicho
pedido, enviaran un representante del gobierno de Francia, para firmar un
tratado y así negociar de igual a igual, entre ambos Estados: el francés y el
de la Confederación Argentina. Finalmente, un ministro plenipotenciario de
Francia firmó el tratado y con ello quedaba claro que dicho país reconocía a la
Confederación Argentina como un Estado soberano.
El
bloqueo anglofrancés
Rosas
mantenía una política de exclusividad del puerto de Buenos Aires para el
comercio exterior. No permitía la libre navegación de los ríos Paraná y Uruguay
y bloqueó el puerto de Montevideo en apoyo a Oribe, líder de uno de los
sectores políticos que se enfrentaban en la Banda Oriental. Esa situación
generó dificultades a los comerciantes vinculados al comercio exterior. Las
potencias marítimas y comerciales buscaban intervenir en la política de los
Estados del Río de la Plata para asegurar su liderazgo comercial. Requerían la
libre navegación de los ríos de la Plata, Paraná y Uruguay, y dividir
políticamente la región. En los años previos, la intervención diplomática
británica había logrado la creación de un Estado independiente, Uruguay. En
1845 intentaban que Corrientes y Entre Ríos se separaran definitivamente de
Buenos Aires, de modo tal que los ríos Paraná y Uruguay se transformaran en
internacionales y libremente navegables. Con esos fines, Francia y Gran Bretaña
declararon un bloqueo al puerto de Buenos Aires. El conflicto duró algunos años
que incluyeron negociaciones y episodios de resistencia, como el de la Vuelta
de Obligado, el 20 de noviembre de 1845. En esa oportunidad las tropas criollas
que apoyaban a Rosas intentaron impedir el paso de la flota británica río
adentro sobre el Paraná. Finalmente se acordó la paz con Inglaterra, que
levantó el bloqueo en 1849 y con Francia en 1850. Los dos imperios debieron
reconocer la soberanía sobre los ríos interiores. Durante ese conflicto, Rosas
perdió el apoyo de muchos hacendados que se vieron impedidos de vender sus
productos, aunque también resultaran
beneficiados, dado que cesaron las matanzas de ganado y con ello se incrementó
la hacienda y las ventas posteriores.
La
ocupación de las Islas Malvinas
Las
Islas Malvinas eran reconocidas como parte del territorio de las Provincias
Unidas del Río de la Plata. En 1829 fue enviado como gobernador Luis Vernet,
quién administró sus territorios, dedicados a la cría de ovinos. Entre las
medidas que implemento, se incluyeron la prohibición de caza de lobos marinos y
ballenas que realizaban las potencias extranjeras en la zona, y la introducción
de un impuesto a la pesca.
Como
un parte de un plan para dominar los mares y rutas comerciales, Gran Bretaña
usurpó las islas Malvinas el 2 de Enero de 1833, y desde entonces permanecen en
manos británicas. Conocida esta noticia en Buenos Aires, durante ese mismo
enero, se iniciaron los reclamos por el atropello y el conflicto aún continúa
sin resolución.
TRANSFORMACIONES ECONÓMICAS
Y SOCIALES EN TIEMPOS DE LA
FEDERACIÓN ROSISTA
Durante
el gobierno de Rosas la economía experimentó importantes cambios, algunos de
los cuales continuaron tendencias iniciadas en la década anterior. Por ejemplo,
se consolidó la importancia de los grandes terratenientes.
En
la provincia de Buenos Aires, las llamadas campañas contra el indio permitieron
la incorporación de nuevas tierras para la explotación ganadera. Esta actividad
había experimentado una expansión que beneficiaba a los dueños de los saladeros
y a los comerciantes y financistas que se dedicaban al comercio exterior,
quienes en algunos casos combinaban ambas actividades. Se había consolidado un
importante circuito comercial internacional con fuerte presencia inglesa, en el
que Argentina participaba como productora de productos agropecuarios, en
particular ganaderos, como por ejemplo cueros, carnes, lanas, sebo, etc.
El
Litoral continuaba con su vieja demanda por la libre navegación de los ríos.
Las economías del interior se veían perjudicadas por la importación de pro-
ductos extranjeros. Pedían medidas proteccionistas para sus productos pero sin
mayores éxitos. En función de este problema se dictó la Ley de Aduanas de 1835
pero los bloqueos impuestos por Francia e Inglaterra dificultaron el logro de
los objetivos que se proponía dicha ley.
LA
CAÍDA DE ROSAS
Hacia
fines de la década de 1840 la economía se encontraba en expansión y habían
cesado las convulsiones políticas. Sin embargo esos hechos no impidieron que el
orden rosista ingresara en su etapa final. El crecimiento económico basado en
la actividad ganadera había beneficiado a Entre Ríos y el gobernador Justo José
de Urquiza -aliado de Rosas en años anteriores- comenzó a diferenciarse
políticamente de él. El enfrentamiento no tardó en producirse. Una alianza
nacional e internacional liderada por el gobernador entrerriano puso fin a la
experiencia rosista cuando los ejércitos se enfrentaron el 3 de febrero de 1852
en la batalla de Caseros.
Tanto
Rosas como Urquiza eran federales, pero con diferencias. Mientras Rosas era
autonomista y nunca había convocado a
las provincias para la aprobación de una Constitución, lo que le permitió
mantener su hegemonía y los recursos de la aduana como exclusivos para Buenos
Aires; Urquiza era un federal del litoral, solicitaba una constitución que
ordenara la federación y reglamentara el uso de los recursos de aduana. Como
federal del Litoral necesitaba la libre navegación de los ríos Paraná y Uruguay
para la comercialización de la producción en iguales condiciones que Buenos
Aires. El distanciamiento entre Rosas y Urquiza se agravó durante los bloqueos
ya que las restricciones impuestas por Rosas perjudicaban a Urquiza y muchos
entrerrianos comenzaron a usar el puerto de Montevideo. En 1850, Rosas fue
reelegido gobernador de Buenos Aires, pero Corrientes y Entre Ríos no le
otorgaron plenos poderes a Rosas ni reconocieron la Confederación. Urquiza, que
con ese acto rompió relaciones con Rosas, se dispuso a enfrentarlo. Para ello
contó con el apoyo de Brasil, que también solicitaba la libre navegación de los
ríos Paraná y Uruguay para comerciar directamente con las provincias de la
Mesopotamia. En 1851, representantes de Entre Ríos, Corrientes, Uruguay y Brasil
firmaron una convención para vencer a
Rosas. Allí se acordaba entregar el mando a Urquiza para que condujera el
enfrentamiento que finalmente se concretó el 3 de febrero de 1852 en los campos
de Caseros. Rosas, vencido, firmó su renuncia y se embarcó hacia Inglaterra.
ACTIVIDAD 2
1) ¿Cómo
caracteriza el autor a los caudillos?
2) La
efímera presidencia de Rivadavia cayó por una diversidad de causas. Identifique
y explique brevemente en un cuadro las relacionadas con:
•
Causas internacionales
•
Enfrentamiento con los federales de Buenos Aires
•
Enfrentamiento con el Interior
•
Otras
3) Explique
las diferencias entre la tendencia unitaria y la federal, luego escriba un
párrafo que explique las similitudes y diferencias entre los distintos tipos de
federalismo: el autonomismo rosista, el federalismo del litoral y el
federalismo del Interior.
4) A
continuación le presentamos un listado que contiene distintos grupos y
sectores. Agrúpelos según hayan sido: 1. Sectores que apoyaron a Rosas 2.
Sectores que se opusieron a Rosas.
SECTORES
POPULARES, HACENDADOS BONAERENSES,
GENERACIÓN DEL '37, CAUDILLOS DEL LITORAL, LIGA DEL INTERIOR
5) ¿Qué
significaba que el gobernador Rosas ejerciera "la Suma
del poder público"? ¿Cómo
la obtuvo?
6) Señale la opción correcta: ¿Qué países bloquearon
el
puerto
de Buenos Aires en 1845?
1.
Brasil y Francia 2. Francia y Gran Bretaña 3. Gran Bretaña y Holanda 4. España
y Alemania
ACTIVIDAD 3
1.
Identifique los hechos políticos, enfrentamientos militares, elección de
autoridades, firmas de acuerdos, sanción de leyes, etc., u otros aspectos que
usted considere importantes.
2.
Clasifíquelos según estén vinculados a:
- la subordinación al gobierno central
-
la organización institucional
-
la integración territorial
UNIDAD 2: Crisis de la
democracia ampliada y restauración oligárquica
El año 1880 marcó el inicio de una nueva etapa en la historia argentina. Luego de varias
décadas de enfrentamientos se
produjo la consolidación del Estado nacional. Desde entonces y
hasta
1916, Argentina tuvo un régimen político conservador. Sobre ese período nos hemos
extendido en Historia B. Para sintetizar algunas de sus características podemos decir que un reducido grupo -que
representaba los
intereses de los sectores
terratenientes- tenía garantizado su acceso al gobierno. Mediante el manejo de los
padrones electorales y el fraude,
ese grupo triunfaba en las elecciones.
En
esos años surgieron grupos políticos que
se enfrentaron a ese sector
y que denunciaban las características de ese régimen político, entre ellos la Unión Cívica Radical. En 1912 se sancionó la
Ley Sáenz Peña que establecía el voto universal, obligatorio y el secreto. De
ese modo se garantizaba que la democracia,
que hasta entonces había tenido un
carácter restringido, lograra ampliarse. También se aseguraba
"la pureza de sufragio", es decir que se redujeran fuertemente las posibilidades de cometer fraude.
2.1. Los gobiernos radicales y la década
del ‘30
En
1916 la Ley Sáenz Peña fue aplicada por primera vez en una elección
presidencial. El triunfador fue Hipólito Yrigoyen, candidato por la Unión
Cívica Radical, quien obtuvo un masivo apoyo popular. Comenzaba así una etapa
de catorce años en los cuales ese partido ganaría las elecciones. La primera
presidencia del radicalismo se extendió hasta 1922. Ese año fue electo Marcelo
T. de Alvear, quien concluyó su mandato en 1928. Luego, Yrigoyen fue reelecto
-él lideraba un ala de la U.C.R.- pero su segunda presidencia fue interrumpida
en 1930 por el primer Golpe de Estado militar.
Durante
los gobiernos radicales se produjo una mayor apertura democrática y una
mayor participación política. En esos años, la Ley Sáenz Peña estuvo vigente y el
voto popular fue respetado. Sin embargo se produjeron duros actos de represión contra los trabajadores durante la denominada Semana Trágica en
1919 y en los sucesos de la "Patagonia Rebelde", en los
primeros años de la década del '20. La acción represiva frente a las protestas de los trabajadores demostraba los límites de la apertura política.
En
el terreno económico, siguió vigente el modelo agroexportador *. Sin embargo,
se produjeron algunos cambios que
anticipaban desarrollos futuros. Como
consecuencia de la Primera Guerra se frenó la llegada de productos industrializados
de Europa. Eso dio lugar a un incipiente proceso de producción de bienes elaborados que tenía lugar sobre todo en pequeños talleres y fábricas ubicadas en las
ciudades. Se descubrieron nuevas riquezas -el carbón en Río Turbio, el petróleo en Comodoro Rivadavia-
que fueron explotadas por el Estado y no por capitales extranjeros. De a poco se conformaba
una clase media en el marco
de las transformaciones y la modernización que experimentaba el país.
La inmigración extranjera seguía llegando y
las
ciudades del litoral -en especial Buenos Aires- iban
tomando un aspecto
cada vez más europeo, modelo que los dirigentes
políticos y las élites sociales querían imitar. La modernización
avanzaba junto con la
electrificación y las nuevas
formas de transporte –el subterráneo, el
tranvía y más tarde el colectivo- y los distintos barrios iban adquiriendo
características propias.
• Modelo Agroexportador: en
el marco de la expansión capitalista y la división internacional del trabajo, Argentina se insertó en el mercado mundial mediante
la producción agropecuaria dirigida centralmente a
la exportación. De ese modo
se fue estructurando el desarrollo de la economía que respondía a las demandas de ese mercado fortaleciendo la dependencia con
el exterior. La tierra era
monopolizada por los grupos terratenientes,
y los capitales y mano de obra
Los gobiernos radicales
(1916-1930)
La
ley Sáenz Peña de 1912, que establecía el sufragio universal basado en el voto
obligatorio y secreto, estableció el inicio de la construcción de un régimen
democrático en la República argentina.
A
principios del siglo XX, los habitantes de nuestro país que poseían derechos
cívicos mostraban desinterés por los problemas de gobierno y por los asuntos de
la política, que consideraban debían estar a cargo de los profesionales y
caudillos políticos.
El
voto obligatorio fue pensado como un mecanismo para obligar a los ciudadanos a
ejercer sus derechos en la elección de sus representantes en el gobierno.
También así, se podía otorgar credibilidad al sistema democrático –poco
valorado por la utilización sistemática del fraude electoral-, favoreciendo la
participación política de los ciudadanos, por medio de la vía institucional.
Pues se debía convencer a los ciudadanos que sus reclamos podían ser escuchados y respondidos por el Estado.
También
los dirigentes conservadores, radicales y socialistas de la época coincidían en
que debían negociar con los sectores sociales que planteaban conflictos. Pero
la negociación con los sectores del mundo del trabajo podía generar conflictos
con los sectores sociales más favorecidos por la organización económica
vigente, ya que éstos podían sentir que
se afectaban sus intereses.
Este
dilema se profundizó a partir de 1916, cuando asumió como presidente Hipólito
Yrigoyen, candidato y jefe de la Unión Cívica Radical. Yrigoyen obtuvo el apoyo
electoral de un sector de la elite y de gran parte de los sectores populares
urbanos de la Capital Federal y de otras ciudades del interior del país. La
victoria de Yrigoyen significó la llegada de un nuevo sector social, hasta
entonces alejada del manejo del Estado: la clase
media.
El
radicalismo de principios del siglo XX era un movimiento político que
aglutinaba a un sector heterogéneo de la sociedad. Representaba a los sectores
medios urbanos y a los sectores humildes; también contaba con menor aceptación
en los sectores obreros. Pero también se debe señalar que un gran número de los
dirigentes radicales pertenecía a las familias tradicionales del país. Ellos
constituían la élite del partido.
A
pesar de contar con el apoyo popular, el presidente Yrigoyen se sentía inseguro
de ser respaldado por las instituciones. Los radicales tenían el gobierno pero
no tenían el poder. Cuando asumió la presidencia en 1916, los representantes
del régimen conservador continuaban teniendo la mayoría en el Congreso Nacional
y el Poder Judicial. Lo mismo sucedía en las gobernaciones provinciales, que en
su gran mayoría estaban en manos de los conservadores. Ante esa situación,
Yrigoyen respondió interviniendo las provincias e incrementando las partidas
presupuestarias bajo su control, como estrategias para volcar a su favor las
situaciones provinciales que no le eran
políticamente favorables.
Yrigoyen
procuró defender el patrimonio nacional, al mismo tiempo que aumentaba la
intervención del Estado en la vida económica. Algunas de las políticas
adoptadas fueron:
•
La recuperación de tierras
públicas que habían sido enajenadas al Estado.
•
La declaración de los
yacimientos petrolíferos como bienes del Estado.
•
La promoción de una marina
mercante nacional.
•
La expansión del gasto
público, mediante el aumento de los empleos
públicos.
Yrigoyen
fue un defensor de la soberanía y los intereses del país ante las potencias
extranjeras. En esa línea fue que mantuvo la neutralidad frente a Primera Guerra Mundial.
Durante
la guerra, la industria local se desarrolló debido a que el conflicto bélico
impedía el arribo de los productos manufacturados extranjeros. Por su parte,
los sectores ganaderos se beneficiaron del comercio con las naciones en guerra,
ya que las abastecieron de productos alimenticios y artículos industriales.
La
cuestión social fue un serio problema
que Yrigoyen debió enfrentar. Las condiciones de vida de los obreros eran muy
difíciles. Se caracterizaban por tener salarios bajos y horas de trabajo
excesivas. Había explotación laboral de niños y mujeres y carecían de leyes que
protegieran el desempleo, la vejez y la enfermedad. Todos esos motivos
impulsaron a los obreros a agruparse y a defenderse, en los sindicatos y
organizaciones gremiales.
Frente
a los conflictos entre el mundo del capital y el del trabajo, el gobierno
adoptó una actitud de mediación pacífica, sin alterar el orden económico social
vigente que generaba esas injusticias. Cuando los conflictos se profundizaban,
la posición negociadora daba paso a la represiva. Uno de los episodios en los
que se desató una dura represión fue durante la “semana trágica” -sucedida en
enero de 1919, que produjo la muerte de un centenar de trabajadores, cuando una
huelga de obreros metalúrgicos de los talleres Vasena, se extendió como una
huelga general.
Con
sus marchas y contramarchas, Argentina vivió en las décadas de los gobiernos
radicales, un período de modernización social que se manifestaba en distintos
planos: político, cultural, etc.
La
llamada Reforma Universitaria fue el
resultado de la democratización dentro de la enseñanza universitaria.
La
Reforma surgió de un movimiento que nació en Córdoba en 1918, como reacción
contra la organización anticuada y selectiva de la Universidad de dicha ciudad.
El movimiento reformista propiciaba la actualización de los planes de estudio;
la selección del cuerpo docente basado en la capacidad; la vinculación de la
Universidad con los problemas sociales del país, la participación activa de los
estudiantes en la dirección de las
universidades.
Por
otra parte, la clase media deseaba el ascenso social de sus hijos a través de
las profesiones liberales, queriendo así un libre acceso a los estudios
universitarios. El gobierno admitió con simpatía al movimiento reformista y
acompañó esos cambios.
Actividad 8
Sintetice
los principales aspectos que caracterizaron al gobierno de Yrigoyen teniendo en
cuenta los siguientes ejes:
•
Plano político -incluya las
relaciones internacionales-.
•
Plano económico.
·
¿Qué papel tuvo el Estado en
relación con los reclamos sociales, laborales, económicos de los distintos
grupos sociales?
En
1922 finalizó el primer mandato de Yrigoyen y como la Constitución no permitía
la reelección presidencial, el radicalismo debió elegir otro candidato.
Yrigoyen propuso como su sucesor a Marcelo Torcuato de Alvear. Perteneciente a
una familia tradicional y acaudalada, Alvear se desempeñaba como embajador en
Francia. Su elección fue motivada por la necesidad de Yrigoyen de evitar la división
del partido radical; Alvear era apoyado por los sectores disidentes de la elite
tradicional.
Finalmente,
el radicalismo triunfó en las elecciones y Alvear asumió la presidencia el 12
de octubre de 1922. El desarrollo de su mandato se caracterizó por los
conflictos entre los intereses de los grupos de élite y de los sectores medios
que apoyaban al partido.
El
nuevo presidente no era partidario de las intervenciones a las provincias y por
otra parte disminuyó los nombramientos en empleos públicos para sus
partidarios. Los miembros de la élite exigieron el respeto a la Constitución
Nacional, lo que significaba que debían finalizar las intervenciones federales
a las provincias por decreto del Poder Ejecutivo, mientras que el control gasto
público debía ser ejercido por el Congreso Nacional. El grupo conformado por
los yrigoyenistas criticaba la postura aristocrática de Alvear, denunciando que
éste se alejaba de los ideales democráticos del partido radical. Por otro lado,
el grupo constituido por los radicales antipersonalistas, criticaban la
adhesión incondicional de los seguidores de Yrigoyen, a quienes denominaron personalistas.
En
el año 1925 se fundó la Unión Cívica Radical Antipersonalista, que se enfrentó
al sector yrigoyenista. Yrigoyen contaba con el apoyo de la mayoría del
partido, integrado por una mayoría de miembros de la clase media, su imagen de
caudillo carismático atraía diferentes sectores sociales.
Pero
la política que llevaba adelante el presidente Alvear no conformaba a ninguno
de los dos sectores. A fines de 1923, Alvear había perdido el apoyo de sus
ministros conservadores y de la mayoría de los legisladores radicales y los
comités del partido estaban divididos en su apoyo.
Entre
1920 y 1922 –luego de finalizada la guerra- se produjo una crisis ganadera
debido a la caída de la venta de carne a Europa, por las medidas
proteccionistas adoptadas por los países del viejo continente. Esa situación
afectó a los intereses económicos de los terratenientes exportadores, lo que
hacía más difícil mantener su apoyo al gobierno radical.
Actividad N° 9
En
1922 el radical Marcelo T. de Alvear sucedió a Yrigoyen en la presidencia:
“Alvear constituía [...] un símbolo
del repliegue y reagrupamiento de fuerzas del
radicalismo, a la vez que con él se pretendía apaciguar a los grupos de la aristocracia que
tantos problemas habían creado durante las huelgas. [...]como Sáenz Peña,
buscaba la forma de promover una alianza eficaz entre la aristocracia y el
pueblo, pero parecía rechazar los aspectos más
aventurados y progresistas que presentaba la política de Yrigoyen.”
(Tomado
de Rock, D.: El radicalismo argentino, 1890-1930, Amorrortu, Buenos Aires,
1977.)
1.
¿Qué divisiones se produjeron
dentro del radicalismo y qué características tenían cada uno de los grupos?
2.
Imagine que usted consulta un
libro de historia argentina y lee una frase en la que su autor afirma lo siguiente:
“Los gobiernos
radicales no produjeron cambios profundos respecto
de la República Oligárquica (que se
desarrolló entre 1880 y 1916), por lo que puede sostenerse que, entre 1916 y
1930 siguió vigente el mismo modelo de país del período
previo.”
Redacte
una explicación de la frase, con argumentos a favor (para sostener) o en contra
(para refutar) lo que allí se afirma.
2.2. La
restauración conservadora: Estado y economía en la Argentina de los años ‘30
Occidente comenzaba a reponerse de los efectos de
la Primera Guerra Mundial en la década
de 1920. Pero a su fin sufrió un nuevo y durísimo golpe: una tremenda crisis económica,
conocida como “la Gran Depresión”(1), marcó toda la década siguiente . El 29 de octubre de 1929,
el “jueves negro”(2), quebró
la Bolsa de Valores de Nueva York,
que posteriormente arrastró al
resto de
los
centros financieros
de todo el mundo. Esto
produjo una baja en la producción y el comercio
internacional y un fuerte aumento
de la desocupación.
Para resolver
la situación,
los distintos gobiernos optaron por la aplicación
de políticas económicas
intervencionistas, tales como la creación
de puestos de trabajo, la nacionalización y la participación
estatal en las empresas,
los controles de precios y
salarios, etc.
La crisis económica había demostrado que el mercado no podía regularse
por sí mismo. De esta
forma, en la década del
30, el liberalismo económico -así como planteamos más arriba
respecto del liberalismo
político- entró en una fuerte crisis. Nuestro país no
escapó a esta situación y esa doble
crisis marcó el desarrollo
de los años siguientes.
1 "La Gran Depresión":
período de gran crisis económica y social que tuvo
derivaciones políticas. Surgió producto de la extensión y gravedad de la crisis que se precipitó luego del derrumbe
de la Bolsa de Nueva York en
1929, y cuyas manifestaciones más profundas se extendieron hasta 1932. El peso y vinculación que tenía la economía norteamericana en el mercado
mundial potenciaron y extendieron los efectos esa crisis
en el mundo.
2 Jueves Negro: se
denomina así al día 24 de octubre de
1929 cuando se produjo el derrumbe de la
Bolsa de Nueva York. Luego de una fuerte ola especulativa
sobrevino una corrida de inversores, quienes intentaban deshacerse de acciones
que no encontraban compradores.
La
gran crisis del 1929 alteró el funcionamiento del sistema económico mundial,
provocando cambios en la estructura económica y social. En nuestro país provocó
el agotamiento del modelo agro exportador: los países centrales, aumentaron la
protección de sus economías y disminuyeron sus compras de materias primas a los
países periféricos, con el objetivo de salir de la crisis.
Gran
Bretaña, el principal comprador de cereales y carnes argentinos, determinó la
reducción de las importaciones de alimentos. Esto produjo la caída de las
ganancias de las exportaciones. También disminuyeron las reservas de oro, lo
que generó una alteración en toda la economía nacional.
El gobierno tuvo que reducir el gasto público y
en consecuencia, los empleos públicos que otorgaba. Esta política provocó la
pérdida del apoyo político al gobierno de Yrigoyen, quien se encontraba en su
segundo mandato como presidente desde 1928.
Las
consecuencias de la gran crisis en nuestro país en términos generales fueron
las siguientes:
•
La quiebra de las fábricas.
•
El desempleo
•
La caída de más del 30 % de
las exportaciones, por no poder vender carnes y cereales en el exterior.
•
El descenso del 14% de la producción.
•
La disminución de los salarios.
•
La pérdida de valor del peso nacional.
•
EL aumento de precios.
•
La disminución de los ingresos
de la aduana.
•
El descontento en la sociedad.
Hasta la crisis
del ’29, la economía argentina se había desarrollado como productora de materias
primas para el mercado mundial. Pero la crisis afectó el funcionamiento de ese
modelo, es decir que impactó en la estructura económica sobre la que el país
había basado su progreso: el modelo
agroexportador. En ese marco, el Estado profundizó la política de industrialización -que se había empezado
a desarrollar durante la Primera Guerra Mundial- con el objetivo de sustituir
los productos que hasta entonces provenían del mercado externo.
Los
cambios económicos produjeron, a su vez, consecuencias en la distribución
demográfica de la población. Los cinturones urbanos de las grandes ciudades se
expandieron, recibiendo a los migrantes internos expulsados de las economías
rurales en crisis, atraídos por el crecimiento industrial y la consecuente demanda de mano de obra. En ese contexto, a lo largo
de la década del ‘30
creció la clase obrera argentina y se
modificó su composición.
Políticamente,
los sectores conservadores tradicionales se propusieron suspender la
participación política ampliada que había iniciado la Ley Sáenz Peña y volver
al poder para proteger sus intereses a través de un golpe militar.
El
golpe fue encabezado por los generales Agustín P. Justo y José F. Uriburu y
provocó el fin de la segunda presidencia de Yrigoyen el 6 de setiembre de 1930.
Así, retornó al poder la elite económica y social que lo había detentado antes
del gobierno radical de 1916.
La
reaparición de un gobierno conservador excluyó de la participación política a
la mayoría de la población y se reiteraron las prácticas fraudulentas en las
elecciones. Este período iniciado en 1930 ha recibido el nombre de “década infame”.
Los sectores conservadores consideraban que la democracia
ampliada era una degradación de la política e, incluso, una antesala del
comunismo. Sin embargo, durante la década del ’30, esos sectores “guardaron las formas”, es decir, conservaron el mecanismo de
las elecciones pero utilizando el fraude.
Actividad
N° 10
•
¿Por qué es posible afirmar
que el Golpe de Estado de 1930 marcó la crisis del modelo político liberal de
la Argentina?
•
¿Por qué se puede relacionar
esa crisis con el contexto internacional?
La Segunda Guerra
Mundial (1939-1945)
Esta guerra fue un acontecimiento histórico que impactó en
todo el mundo. Ningún país pudo mantenerse al margen, sea porque participó
directamente en la contienda, o bien por los efectos directos e indirectos que
produjo el conflicto bélico en las distintas naciones.
Desde
comienzo del siglo XX y terminada la primera guerra mundial, se perfilaba la
posibilidad de un nuevo enfrentamiento. Los tratados de paz que cerraron la
primera guerra no parecían garantizar condiciones de equilibrio social y
crecimiento económico para los Estados europeos. El panorama se presentaba
incierto. En las décadas siguientes –la del ’20 y la del ’30- se desenvolvieron
un conjunto de procesos y acontecimientos que presagiaban un nuevo conflicto.
Tal es así que, muchos historiadores afirmaron que este período de entreguerras
fue una tregua entre un conflicto y otro.
El
triunfo de la revolución en Rusia en 1917, el ascenso al poder de Mussolini en
Italia en 1922 y de Hitler en Alemania en 1933, señalaron la crisis en la
creencia de la democracia como forma de organización política. Las
consecuencias sociales de la guerra, el desempleo y la miseria, que se
profundizó con las crisis económicas, favorecieron el desarrollo de formas de
organización social y política opuestas a los principios del liberalismo
político y económico.
Los bloques enfrentados
Los
bloques enfrentados en la guerra fueron: los países del Eje, que eran Alemania,
Italia (que se sumó en 1940 hasta que en 1943, cuando cambió de alianza), Japón (desde 1941) y países de Europa
oriental que se hallaban bajo la influencia de Alemania, como Bulgaria y
Rumania. Por otro lado, estaban los Aliados,
un bloque compuesto por Francia y
Gran Bretaña, a los que
posteriormente se sumaron la Unión
Soviética y Estados Unidos.
El escenario de la guerra no fue sólo el europeo, el
conflicto también se desarrolló en África del Norte, los Balcanes y Medio
Oriente.
Comienzo y desarrollo
de la guerra
El
13 de marzo de 1938 Hitler tomó la decisión de anexar Austria y a principios de
1939 se apoderó de Checoslovaquia. Esta decisión se basaba en la teoría del “espacio
vital” y la existencia de una raza superior -la raza aria-, cuyos mejores
exponentes eran los germanos. Sostenía que para que Alemania pudiera
desarrollar sus potencialidades necesitaba de ese espacio vital. Además, en
países cercanos se encontraba dispersa población germana que, según Hitler,
debía integrarse en una Gran Alemania desde donde sería dirigida.
En
un comienzo, estos sucesos fueron vistos por las potencias occidentales como
una forma de evitar la propagación del comunismo, razón por la cual no se
opusieron al rearme de Alemania y a su avance territorial. Pero el detonante de
la guerra mundial se produjo en septiembre de 1939, cuando Hitler invadió
Polonia. Inglaterra y Francia le declararon la guerra. A los pocos días de la
invasión, Varsovia (capital de Polonia) se rindió y el país quedó repartido
entre Alemania y la URSS (conforme a un pacto que había sido firmado
previamente entre ambos Estados).
Alemania
atacó, a principios de 1940 a Dinamarca, Noruega, Holanda y Luxemburgo. En
junio de ese mismo año las tropas alemanas invadieron Francia, llegaron a París
y el territorio quedó dividido: el norte, ocupado directamente por Alemania y
el sur, bajo el gobierno colaboracionista nazi presidido por Pétain, con
capital en Vichy.
En
varios países se organizaron grupos civiles de resistencia, clandestinos, que
hacían operaciones armadas y de espionaje como en Italia, Yugoslavia y Francia,
país este último donde se organizó la resistencia con sede en Argel (África) y
que dio el poder político al Genera De Gaulle.
En
1941 se produjeron dos hechos importantes que hicieron que la guerra se
universalizara: uno fue la ruptura de la alianza entre la URSS y Alemania
cuando ésta decidió invadir territorio soviético. El otro, la entrada de Japón
en la guerra que desde 1937 estaba luchando contra China y en julio de 1941
consiguió el apoyo alemán. Estados Unidos intimó a Japón a retirar sus tropas
de China e Indochina. Los japoneses respondieron bombardeando la base militar
de Estados Unidos de Pearl Harbour en las islas Hawai en el Pacífico.
Estos
hechos hicieron que la Unión Soviética y Estados Unidos entraran en guerra con
el Eje. Con dos frentes abiertos, el oriental y occidental, la ofensiva alemana
comienza a debilitarse a partir de 1943, cuando es derrotada por la Unión
Soviética en Stalingrado y cuando los aliados desembarcan en Italia (en
Sicilia) para liberarla. El rey italiano Victor Manuel III destituyó a
Mussolini del gobierno, lo mandó a arrestar, disolvió el partido fascista y
firmó un armisticio con los aliados, declarándole la guerra a Alemania.
Mussolini, con la ayuda nazi, creó en el norte de Italia una república desde
donde pretendió seguir gobernando.
En
junio de 1944, los aliados desembarcaron las costas de Normandía (Francia) (en
Normandía) llamado el “Día D”, y dos
meses después liberaron París. En abril
de 1945, llegaron a Berlín (Alemania) y derrotaron a Hitler
quien se suicidó, al igual que varios de sus colaboradores. Unos días antes, al
ver la derrota de Hitler, Mussolini intentó escaparse a Suiza, pero fue
capturado y fusilado por grupos de la resistencia, los partisanos.
Japón,
por su parte, continuó resistiendo y se negó a la rendición hasta que Estados
Unidos decidió arrojar dos bombas atómicas en las ciudades de Hiroshima y
Nagasaki el 6 y 9 de Agosto respectivamente. Esto obligó a Japón a rendirse
finalizando así la guerra el 14 de agosto de 1945.
Actividad
11
•
¿Cuándo y por qué se desató el conflicto?
•
¿Qué países intervinieron?
•
¿Cómo y cuándo terminó?
•
A partir de la información
trabajada para la Primera Guerra Mundial y con los datos que usted ya posee de
la Segunda Guerra Mundial: ¿podríamos pensar que el período de entreguerras
(1918-1939) fue una tregua? Fundamente su opinión.
La Argentina de la “década
infame” en un mundo encaminado hacia la guerra
La
década de 1930 se inició con la ruptura del orden constitucional, una situación
novedosa para el país. Esto continuó con un período de inestabilidad
institucional caracterizada por la interrupción de los gobiernos
constitucionales que se mantuvo durante los siguientes 50 años de nuestra
historia. Las aspiraciones políticas y de poder de las Fuerzas Armadas
impulsaron estos sucesos. Además, como ya lo señalamos, en 1930 retornó al
poder la elite económica y social que había gobernado antes radical de 1916. El
resurgimiento de un gobierno conservador excluyó de la participación política a
la mayor parte de la población y se implementaron nuevamente las elecciones
fraudulentas.
Como señaláramos, este período se conoce como “década infame”.
Estos sectores estaban
en desacuerdo con el
avance de las clases medias,
a quienes consideraban “gente sin educación”. Entre los propósitos del gobierno (encabezado
por Uriburu) que había surgido del golpe de Estado, estaban combatir al
radicalismo en todos los ámbitos y limitar el derecho al voto, para reducir la
participación política.
En
los primeros años de la década,
durante el gobierno de facto, se
enfrentaron dos proyectos distintos. El
primero de ellos, el
derrotado, era sostenido
por el general
Uriburu (primer presidente
surgido del golpe de Estado
a Yrigoyen) quien proponía el
establecimiento del corporativismo
en nuestro país.
Uriburu,
admirador de la experiencia de Mussolini en Italia, había promovido construir
un régimen fascista en Argentina, que fue rechazado por los partidos
tradicionales y la opinión pública en su mayoría. Ante las presiones políticas,
el gobierno se comprometió a organizar elecciones en 1931 para renovar
gobernadores y legisladores de algunas provincias.
El segundo proyecto, el triunfante, fue sostenido por Agustín P. Justo y
la coalición
política que lo apoyaba, llamada la Concordancia. Éste se proponía
mantener al sistema democrático legal en sus aspectos
formales, violando las reglas del
sistema en las acciones
concretas. Proscribía la participación
de los partidos populares
como el radicalismo
y el comunismo. Se utilizaba
la compra de votos y el
fraude electoral -llamado entonces “fraude patriótico”, porque entendían que era un fraude que salvaba a “la patria”-.
Los sectores sociales, que cuestionaban el funcionamiento
de ese sistema eran duramente reprimidos. El gobierno de
Justo, entre 1932 y 1938, se basó en esta política.
La
actitud de los gobiernos conservadores de la época respecto de los problemas
sociales osciló entre la represión y la indiferencia. La persecución política y
sindical fue la primera reacción del nuevo régimen oligárquico frente a las
demandas sociales de los trabajadores. Se produjeron numerosas deportaciones de
obreros extranjeros. El encarcelamiento y la tortura se convirtieron en
prácticas habituales.
Al acercarse la década del ‘40, esa estrategia empezó a mostrar
su debilidad. El dirigente conservador Rodolfo Moreno afirmaba: “La situación espiritual del país ha cambiado; la masa popular
[...] vuelve a sus viejos
amores demagógicos y amenaza con restablecer el
sistema materialmente derrotado [...]. Las fuerzas gobernantes sienten la proximidad del
peligro y recurren a los medios
vedados por la ley para
no perder posiciones...”
En
1938 llegó a la presidencia Roberto Ortiz, que impulsaba un proyecto favorable
a una democratización del sistema político “desde
arriba”. Pero en 1940, Ortiz
tuvo que retirarse del poder y asumió su vicepresidente,
Ramón Castillo, quien no veía con buenos ojos las propuestas de su antecesor.
Los
dos problemas externos que mayor impacto tuvieron en la vida política argentina
durante la década de 1930 fueron la Guerra Civil española (1936-1939) y la
Segunda Guerra Mundial (1939-1945). Durante la Segunda Guerra Mundial, los
partidos políticos argentinos se pronunciaron a favor de uno u otro bando.
Los
gobiernos conservadores de Justo y Ortiz dieron un apoyo tácito a los aliados.
El gobierno de Castillo, en cambio, mostraba mayor simpatía por el avance alemán.
El
4 de septiembre de 1939 la Argentina se declaró nación no beligerante, es decir
país neutral. El gobierno de Ortiz, desconoció el avance alemán por Europa. La
guerra mundial incrementó la importancia política de los sectores militares, a
la vez que provocó el alineamiento de las fuerzas políticas según sus simpatías
por los contendientes de uno u otro bando. Los conservadores y nacionalistas se
inclinaron en favor de Eje y los radicales y socialistas, en favor de los
aliados.
Las
razones fundamentales de la neutralidad pueden encontrarse en las cuestiones
económicas. Por ejemplo, las exportaciones a Gran Bretaña dependían de que
Argentina siguiera manteniendo relaciones diplomáticas con Alemania. Si se
iniciaban acciones hostiles hacia el Eje, el comercio marítimo se vería
amenazado por la guerra en el Atlántico.
El retorno de la política
conservadora “más pura”,
cuando el vicepresidente Castillo asumió la presidencia, junto al
clima político internacional -la Segunda Guerra Mundial- dieron lugar al golpe
de Estado de 1943 que puso fin a esta etapa. El golpe lo encabezó el GOU, un
grupo de oficiales dentro del ejército. Dentro de sus filas se encontraba el
Coronel Perón.
Actividad N°12
Realice
una síntesis sobre el golpe de Estado de 1943. Para ello, tenga en cuenta las
siguientes preguntas:
•
¿Cuáles fueron las prácticas políticas de la década del ‘30 y cómo influyeron en el descrédito del sistema democrático?
•
¿Cómo impactó la Segunda
Guerra Mundial en Argentina?
LAS
CONSECUENClAS SOClALES Y ECONÓMlCAS DE LA CRlSlS DEL '3O. EL NUEVO ROL DEL
ESTADO
El
período de entreguerras fue una etapa de grandes transformaciones para nuestro
país. Estas empezaron a manifestarse durante la República Radical (1916-1930),
se intensificaron en la década del '30 y dieron como resultado que la Argentina
de 1943 fuera notoriamente diferente a la de 1916.
En
la Argentina, como en gran parte del mundo, también el Estado liberal dio paso
al Estado interventor. Cada vez más, el Estado comenzó a tomar partido en
nuevos asuntos, por lo que se ampliaron sus acciones y se hicieron también más
complejas.
El
liberalismo económico sostenía que el mercado era capaz de regularse a sí
mismo. Pero esa consideración estalló con la crisis
del ’29. El Estado intervino para resolver esa crisis que el propio
mercado había generado. En el nuevo escenario de los años ‘30, el Estado
desplegó un accionar que se alejaba de los postulados del liberalismo.
El
Estado interventor fue la alternativa que permitió, en un primer momento,
subsanar los efectos de la crisis mundial y, posteriormente, reorientar la
estructura económica. El Estado se fue fortaleciendo como un actor que
procesaba las demandas sociales.
La
sociedad en transformación y la economía en crisis requerían del Estado,
medidas de gobierno como el control de cambios y la regulación de precios.
Intervino como mediador en los conflictos sociales, implementó políticas para
resolver la crisis y creó puestos de trabajo.
En
el plano económico, la producción dejó de regirse por el libre juego de la
oferta y la demanda y dio lugar a la planificación mediante las llamadas “Juntas Reguladoras” en las que el Estado
ocupaba un lugar
importantes. Frente a la crisis del modelo agro-exportador, el Estado
interviene en la actividad económica creando organismos reguladores como la
Junta de Carnes y Granos, Yerba Mate, Algodón y Vino entre otras, para regular
la producción.
En
el social, creó el Departamento Nacional del Trabajo, desde donde el Estado
intervino como árbitro o mediador en las huelgas obreras.
Actividad 13
1.
Mencione medidas o acciones en
las que se ponga en evidencia la consolidación del Estado interventor en el
plano político y el social.
Sostuvimos
en
esta unidad que la Primera Guerra Mundial
había estimulado una
incipiente industrialización en la
Argentina. En la década del ‘30, algunos sectores
impulsaron una profundización de
dicho proceso con buenos resultados. En consecuencia la industria
se constituyó en el sector líder de la economía. Sin embargo, los intereses de los sectores terratenientes fueron protegidos por el pacto Roca-Runciman de 1933.
Los
terratenientes, a través de sus corporaciones representativas, como la Sociedad
Rural, presionaron al gobierno reclamando políticas que aseguraran la marcha de
sus negocios ante la crisis del modelo agroexportador. Las dos respuestas más
importantes fueron la firma del pacto Roca-Runciman, en 1933, y el impulso del
proceso de sustitución de importaciones.
El
Pacto Roca-Runciman y la industrialización por sustitución de importaciones
Con
la firma del tratado Roca - Runciman el gobierno de Justo buscó garantizar la
venta de carnes argentinas en el mercado británico, amenazada como consecuencia
de la crisis. Pero las cláusulas del tratado no guardaban reciprocidad entre
las prerrogativas otorgadas por nuestro país a Gran Bretaña y las concedidas
por ese país a la Argentina.
Como
resultado de la crisis internacional, también se produjo un desabastecimiento
de productos industriales y una baja en los precios agrícola-ganaderos. Los
grandes productores rurales nucleados en la Sociedad Rural y sectores políticos
conservadores vieron la necesidad de desarrollar la actividad industrial para
encontrar una solución a la crisis de la economía nacional.
Esta
decisión estuvo determinada por la disminución de las exportaciones argentinas.
Esta disminución significó una menor entrada de divisas para poder continuar
importando grandes cantidades de productos provenientes de Europa. De este
modo, se fueron sustituyendo productos industriales extranjeros por productos
elaborados en el país. A esta industrialización restringida se la llama proceso de sustitución de importaciones.
Gran
Bretaña era el principal comprador de cereales y carnes en la Argentina; en el
marco de la crisis económica mundial, decidió reducir las importaciones
alimentarias. Lo que más preocupó a las clases dirigentes ligadas a los
intereses rurales era en dónde o en qué mercado colocaban sus productos. Los
ganaderos locales lanzaron la campaña “comprar a quien nos
compra”, y presionaron al gobierno reclamando políticas que aseguraran sus negocios.
Consecuencia
de ello, en mayo de 1933 se firmó el Pacto Roca-Runciman, con el objetivo de
asegurar las cuotas de exportación de carne argentina y reafirmar la relación
comercial con Gran Bretaña. El pacto fue firmado por el vicepresidente Julio
Roca (h) y el ministro de Comercio de la corona británica, Walter Runciman.
¿Cuáles
fueron las cláusulas públicas del Pacto?
•
La Argentina se aseguraba
exportar no menos de 390.000 toneladas de carne enfriada, mientras que Gran
Bretaña podía sus compras cuando lo considerara necesario. El 85% de las
exportaciones argentinas debía realizarse a través de frigoríficos extranjeros.
El 15% restante sería exportado por empresas de nuestro país.
•
La Argentina daría un trato
benévolo a las inversiones británicas, tendiente "a asegurar el mayor
desarrollo económico del país y la debida y legítima protección de los
intereses ligados a tales empresas".
•
La Argentina mantendría libres
de aranceles el carbón y demás mercaderías que se importaban en ese momento
exentas de impuestos, comprometiéndose a comprar en Gran Bretaña el total del
carbón que consumía.
•
La Argentina se comprometía a
no aumentar los aranceles aduaneros.
Pero
¿cuáles fueron las cláusulas secretas del Pacto?
•
Se creaba el Banco Central en
la Argentina que tuvo como objetivo reglamentar el sistema financiero. Era una
sociedad mixta constituida por bancos oficiales y extranjeros.
•
Se fijaron las bases para la
creación de la Corporación de Transporte, que le otorgaba a Gran Bretaña el
monopolio de los transportes urbanos.
Actividad 14
a. ¿Qué
fue el Pacto Roca-Runciman? (Quiénes lo firmaron, por qué, qué se establecía).
Otra modificación
que se produjo durante este período tuvo que ver con las migraciones internas. Junto con la disminución de la cantidad de inmigrantes extranjeros, se produjo el desplazamiento de
grandes masas de población dentro de
los límites
nacionales. Los espacios rurales y semirrurales fueron fuertemente afectados por la crisis
agropecuaria y se convirtieron en
importantes zonas expulsoras de población. Las grandes ciudades del litoral, y en especial sus suburbios, fueron los grandes receptores
donde se asentaban los nuevos habitantes.
La
industria se fue desarrollando, en gran parte como respuesta a la crisis del
sistema internacional, y avanzó por sucesivas sustituciones de importaciones.
Determinados productos que dejaban de ser importados eran producidos en el país.
La
disminución de las exportaciones argentinas, en cantidad y valor, determinó el
desarrollo de algunas industrias. Los productores rurales que estaban agrupados
en la Sociedad Rural y los sectores conservadores consideraron necesario
impulsar la actividad industrial como solución a los problemas de la economía
nacional. Las industrias textil y la alimentaria fueron las que más se
desarrollaron. A su vez, también se desarrollaron las de artefactos eléctricos,
maquinarias, y derivados del caucho.
A
partir de 1930, los trabajadores rurales comenzaron a migrar hacia Buenos Aires
y sus alrededores y se transformaron en la principal mano de obra para las
nuevas fábricas. Esta afluencia migratoria de las zonas rurales produjo un
cambio en la composición de la clase obrera argentina. Estos últimos tenían
características distintas a las de los obreros provenientes de Europa. Los
trabajadores rurales no tenían experiencia de trabajo en la fábrica y no
participaban prácticamente en la vida gremial y política. Por el contrario, los
segundos estaban incorporados al trabajo de la industria desde comienzos de
siglo y participaban de una vida sindical y en partidos políticos. Sin embargo,
a pesar de las diferencias mencionadas, todos ellos pertenecían a una misma
clase social y compartían problemáticas similares: situación económica y
condiciones de trabajo desfavorables.
Actividad 15
1.
Realice una síntesis sobre las
características que adoptó la industrialización en la Argentina a partir de las
siguientes preguntas:
•
¿Cuáles fueron los grupos que
la impulsaron?
•
¿Qué cambios se produjeron en
la composición de la clase obrera?
2.
Con la información obtenida en
las respuestas del punto a. elabore un texto que integre los diferentes
aspectos (económicos, sociales y demográficos) que caracterizaron a este
período histórico.
Por
ejemplo, podría comenzar del siguiente modo:
"Los
migrantes internos pudieron emplearse en la industria en expansión... "
O
bien
"La
crisis económica mundial afectó la estructura del modelo
agroexportador..."
Actividad 16
Organice
la información sobre la crisis del ’ 30 teni endo en cuenta el siguiente
esquema. Más abajo le proponemos tres criterios para esta organización:
ü causas
ü medidas
para resolver la crisis
ü consecuencias
ü repercusiones
en la Argentina
En
esta unidad hemos trabajado el período de la historia argentina entre los años
1916 y 1943. En el plano político vimos como se inauguró una nueva etapa
caracterizada por la democracia ampliada. La Ley Sáenz Peña permitió que la
voluntad popular se pudiera reflejar mediante el sufragio. Este cambio facilitó
el acceso al poder del radicalismo. Entre 1916 y 1930 se sucedieron los
gobiernos de Yrigoyen, Alvear y un segundo mandato de Yrigoyen que fue
interrumpido por un golpe de Estado en 1930.
Ese
golpe se produjo en el marco de la crisis económica mundial, que puso en
cuestión los principios económicos
basados en el liberalismo. En respuesta a la crisis que también afectaba a
nuestro país, el Estado argentino puso en práctica las ideas keynesianas. De
este modo, tuvo una participación más activa en la economía.
La
crisis del modelo agroexportador argentino fue consecuencia de la crisis
económica mundial. A partir de la crisis comenzó un período de sustitución de
importaciones que tuvo profundas consecuencias sociales, demográficas y
políticas en los años posteriores.
Mientras
el mundo se encontraba en medio de la Segunda Guerra Mundial, en Argentina se
produjo un nuevo golpe de Estado. En 1943 se abrió una nueva etapa que dio
lugar al surgimiento del peronismo.
Actividad
integradora de la Unidad 2:
1.
Una acontecimientos y
conceptos de ambas columnas utilizando flechas:
Vigencia de la Ley Sáenz Peña Fraude patriótico
Década
infame Democracia
ampliada
Golpe de
Estado Crisis
del liberalismo político
2.
Ordene los siguientes
acontecimientos en forma cronológica:
a- Pacto Roca-Runciman
b- Golpe
de Estado a Hipólito Yrigoyen
c- Conflictos
con los trabajadores rurales de la Patagonia
d- d-
Impacto de la crisis mundial iniciada en Nueva
York
e-
Golpe de Estado a Ramón Castillo
f-
Presidencia de facto de José
F. Uriburu
3 -
Seleccione la opción correcta (puede ser más de una opción)
La crisis del modelo
agroexportador se produjo:
-Por el impacto de la crisis Wall Street
-Porque
Inglaterra dio preferencia de compra a sus ex colonias
-Por
una sequía generalizada que afectó al campo argentino
-Por
la parálisis del comercio internacional a raíz de la caída de la Bolsa
Las migraciones
internas se produjeron por:
-Factores
de expulsión en el campo por la caída de la agroexportación
-Por
la atracción que presentaba la industrialización urbana
-Por
los deseos de los inmigrantes europeos de encontrar nuevas oportunidades
laborales
El Pacto Roca-Runciman:
-
Se firmó con Estados Unidos
para salir de la crisis
-
Se firmó porque Inglaterra
privilegiaba su comercio con Estados Unidos
-
Se firmó porque Argentina
necesitaba asegurar las exportaciones a Inglaterra
-
Tuvo una gran cantidad de
cláusulas económicas favorables para la Argentina
Actividad
“Dictadura y Terrorismo de Estado”
1- El
24 de maro de 1976 se produjo un nuevo golpe de Estado que instaló otra
dictadura cívico militar. Con respecto a este período responda:
A) ¿Por
qué hablamos de dictaduras cívico-militares?
B) ¿En
qué consistió el Terrorismo de Estado?
C) ¿Quiénes
encabezaron la resistencia a la Dictadura?
2- ¿Cómo
fue utilizado el Mundial 78 por la dictadura con respecto a la imagen de
respeto por los Derechos Humanos?
3- ¿Qué
proponía él proyecto económico neoliberal de la dictadura?
4- ¿Por
qué se produjo la guerra de Malvinas? ¿Cuales fueron sus consecuencias?
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